martes, 27 de noviembre de 2007

EL CAYO DEL ESTUDIANTE


De vez en cuando suelo acudir a clase aunque no lo tengo como costumbre, es que es matador. Porque los profesores están todo el rato dictando y te mueres cogiendo apuntes. Yo me pierdo, mejor dicho no me encuentro. Eso de no parar de escribir lo llevo fatal, es superior a mí. Es que mi callo del estudiante ya no es un callo, es un juanete y la cantidad de folios que gasto es impresionante, fijaros si gasto que el otro día me llamaron los de Greenpeace y me denunciaron porque por mi culpa había subido la tala de árboles. Así que suelo acudir una hora a clase y las otras descanso en la cafetería, para no estresarme.
Por desgracia, no es todo jauja en la universidad. Esto cambia cuando llega la época de exámenes, algo que hará desaparecer la raza humana antes que el cambio climático. La gente se deprime, se irrita y se encierra en una habitación o en una biblioteca como un huraño. Tienes que estudiar, lo más aburrido que puede hacer un ser humano después de ver un documental de la dos.
Supuestamente lo haces para tener el día de mañana un trabajo digno. O eso es lo que les haces creer a tus padres, porque lo que de verdad buscas es poder vivir de tus padres hasta que puedas vivir de tus hijos. Lo jodido es si tus hijos nacen con la misma filosofía bajo el brazo.

1 comentario:

paino dijo...

Javi, no te lo crees ni tu lo que dices, no vas a clase porque no te apetece y prefieres hacer otras cosas, asi k no tengas tanta jeta, y no pongas tantas escusas. Por cierto te tengo que devolver nuestro principal sustento para no ir a clase como son tus queridas cartas que incluso hemos utilizado en alguna que otra clase. Bueno por lo demas, felicitar a tus compañeras por el blog, que seguro que no as exo nada. Es broma, que habeis exo todo muy bien, que seguro que os llevais una buena puntuacion.